jueves, julio 02, 2009

Sueño y pesadilla

John Anster Fitzgerald, The stuff that dreams are made of
Podemos derivar dos conclusiones, al menos durante el transcurso de esta noche; ya después cambiará nuestra opinión. La primera es que los sueños son una obra estética, quizás la expresión estética más antigua. Toma una forma extrañamente dramática, ya que somos, como dijo Addison, el teatro, el espectador, los actores, la fábula. La segunda se refiere al horror de la pesadilla. Nuestra vigilia abunda en momentos terribles: todos sabemos que hay momentos en que nos abruma la realidad. Ha muerto una persona querida, una persona querida nos ha dejado, son tantos los motivos de tristeza, de desesperación…Sin embargo, esos motivos no se parecen a la pesadilla; la pesadilla tiene un horror peculiar y ese horror peculiar puede expresarse mediante cualquier fábula. Puede expresarse mediante el beduino que también es Don Quijote en Wordsworth; mediante las tijeras y las hilachas, mediante mi sueño del rey, mediante las pesadillas famosas de Poe. Pero hay algo: es el sabor de la pesadilla. En los tratados que he consultado no se habla de ese horror.
Aquí tendríamos la posibilidad de una interpretación teológica, lo que vendría a estar de acuerdo con la etimología. Tomo cualquiera de las palabras: digamos, incubus, latina, o nightmare, sajona, o Alp, alemana. Todas sugieren algo sobrenatural. Pues bien. ¿Y si las pesadillas fueran estrictamente sobrenaturales? ¿Si las pesadillas fueran grietas del infierno? ¿Si en las pesadillas estuviéramos literalmente en el infierno? ¿Por qué no? Todo es tan raro que aun eso es posible.
Jorge Luis Borges, La pesadilla (Siete Noches)

3 comentarios:

niki dijo...

Creo que "Siete Noches" fue uno de los libros de Borges que más me gustó, porque reúne una serie de conferencias que son una excelente introducción a la literatura.

Loli dijo...

Si, es muy bueno. Lo leí hace un tiempo pero siempre vuelvo porque hay algo que me interesa recordar. Me interesaría conseguir, creo que en algún lado están, los audios de las conferencias.

Un beso y gracias por la visita!

Alfredo Martín dijo...

Borges siempre nos inquieta lo suficiente como para querer seguir leyéndolo. Y el mundo de los sueños es paradójicamente muy cercano, pero lejano a la vez. Gracias Loli.