(¡Oh! ¡Qué trastorno ha padecido esa alma generosa! La penetración del cortesano, la lengua del sabio, la espada del guerrero, la esperanza y delicias del estado, el espejo de la cultura, el modelo de la gentileza, que estudian los más advertidos: todo, todo se ha aniquilado. Y yo, la más desconsolada e infeliz de las mujeres, que gusté algún día la miel de sus promesas suaves, veo ahora aquel noble y sublime entendimiento desacordado, como la campana sonora que se hiende. Aquella incomparable presencia, aquel semblante de florida juventud alterado con el frenesí. ¡Oh! ¡Cuánta, cuánta es mi desdicha, de haber visto lo que vi, para ver ahora lo que veo!)
Miranda
One of my sex; no woman's face remember,
Save, from my glass, mine own; nor have I seen
More that I may call men than you, good friend,
And my dear father: how features are abroad,
I am skilless of; but, by my modesty,
The jewel in my dower, I would not wish
Any companion in the world but you,
Nor can imagination form a shape,
Act III scene I. (La tempestad)
1 comentario:
Ofelia y Miranda, lindo dúo de chancletas... :)
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